La limpieza es algo fundamental en nuestra vida cotidiana. De hecho, es determinante que acudamos o no a un lugar en función de lo limpio que se encuentre. Uno de los lugares más transitados, sobre todo en días próximos a la Navidad son los centros comerciales.

Características de una buena limpieza en centros comerciales

La limpieza en los centros comerciales es algo fundamental para la finalidad de los mismos: la venta. Esto parece lógico. Si acudimos a un centro comercial cuya limpieza sea nefasta, no nos incitará a la compra de productos que se vendan en sus establecimientos, sino que nos provocará la reacción contraria: salir ‘escopetados’ de aquel lugar con las manos vacías.

Sin embargo, a lo largo del día muchas personas ocupan sus ratos libres en visitar escaparates, restaurantes o vitrinas de las tiendas de centros comerciales. En general nos gusta mirar, tocar, desdoblar y, por supuesto, dejar el objeto inicial completamente desordenado y descolocado.

Pero, la limpieza en los centros comerciales, no termina nunca. Cuando el centro comercial cierra sus puertas comienza un largo trabajo de limpieza. Comienzan las labores de recogida de basura, tanto del suelo (porque no olvidemos que pese a las papeleras, siempre hay objetos por el suelo), tanto en papeleras, aseos, restaurantes,… Desinfección del suelo con una variedad de productos específicos que acaben con todo tipo de bacterias y hagan de la limpieza del centro comercial algo de que hablar, o aún mejor, algo de lo que no hablar. Barandillas, vitrinas, cristales, aseos…Todo lo que forma parte del centro comercial debe quedar impoluto antes de que el mismo abra sus puertas al día siguiente. Se trata de un largo y eficiente trabajo de limpieza en centros comerciales que comienza cuando éste  parece no tener vida. Es importante no olvidar que el primer elemento que da vida es la limpieza del centro comercial, ya que si éste careciese de ella, sus instalaciones, suelos y componentes no serían visitados cada día por miles de personas.

La limpieza del centro comercial podría incluso llegar a ser la imagen del mismo, o lo que diferencie en cierto momento los unos de los  otros, más allá del tipo de tiendas o franquicias que albergue cada uno.

Si acudimos a un centro comercial que tenga el suelo limpio, los asientos limpios, los escaparates no parezcan estar detrás de un cristal y que provoquen la sensación de poder tocar con la mano al maniquí que lo habita debido a la gran limpieza de los mismos, nos quedaremos más tiempo dentro de él. Además, la limpieza en centros comerciales incita a la limpieza. Me explico: si  el suelo está limpio, nos dará vergüenza tirar incluso un papel al suelo, mientas que si acudimos a un centro comercial donde la limpieza brille por su ausencia, seguiremos acumulando suciedad inconscientemente.

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